Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/4714
4714 Referencia al fin y a la intervención de Dios....
15 de agosto de 1949: Libro 54
Grandes cosas aún serán reveladas al mundo, pero el mundo no les presta atención.... Fenómenos del tipo más extraño podrían dar a los humanos algo en que pensar, pero sólo oyen, se asombran y pronto rechazan los pensamientos al respecto; Todas Mis advertencias son rechazadas por su sentido mundano; todo lo espiritual es irreal para ellos y no trae ningún beneficio, y por eso no les prestan atención. Pero quien simplemente mira alrededor y está atento reconocerá el fin cercano, porque Yo hablo claramente a los humanos de esta Tierra en todas partes, aparezco de múltiples maneras, doy indicios de lo eternamente divino en todas partes, así como también marco la pecaminosidad de los seres humanos y hago reconocible Mi disgusto.
Hablo suavemente y con Palabras amorosas, pero como también puedo hablar en voz alta, para llamar la atención a los humanos al final, para presentarles los horrores de una muerte repentina y del poder de Aquel a Quien no quieren reconocer y a Quien, sin embargo, están entregados a Su merced y a Quien no pueden oponerse. Reconoced todas estas señales como indicación al final cercano. Y familiarizaos con un final repentino de vuestra vida física. Vivid como si mañana fuese el último día e imaginad vuestra vida futura en el más allá, dados cuenta de si vuestra vida corresponde a Mi voluntad, de si cumplís Mis mandamiento y en qué medida, que exigen de vosotros amor a Mí y al prójimo.
Seréis cada vez más conscientes del fin, y lo que aún os espera es siempre sólo un medio para guiar la voluntad humana, que todavía está alejada de Mí y por tanto pone en peligro vuestra alma. No dejéis que esto medios sean en vanos o ineficaces, solamente cuidaos de todo aquello que contribuya a sacudir el pensamiento humano. Y siempre reconoceréis Mi mano, si sois de buena voluntad, Mi voluntad os será revelada, y tan pronto como Me reconozcáis, todo lo que suceda será una bendición para vosotros, aunque os traiga sufrimiento.
Yo hablo a menudo y en todas partes.... Escuchad Mi voz, no la ignoréis por causa del mundo, porque el mundo decaerá. Pero lo que queda es Mi porción y procurad ganarla para vosotros mismos, esforzaos para que también vosotros seáis contados entre los Míos, aunque todavía estéis lejos de Mí, porque Yo estoy con los Míos en cada angustia del cuerpo y del alma y les doy fuerza para soportar todo lo que traerá el fin de los tiempos. Porque grandes cosas os esperan, donde necesitaréis de mucha fuerza y de una fe profunda para permanecer firmes y fieles a Mí hasta el final....
amén
Traducido por Hans-Dieter Heise