Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/4712

4712 Cooperación en la obra de Redención....Difundiendo el Evangelio....

13 de agosto de 1949: Libro 54

Podéis alcanzar un alto nivel de desarrollo espiritual a través de la cooperación activa en la obra Redentora de Cristo. Su misión en la Tierra fue la de difundir la Enseñanza de amor en la Tierra, y al estar activa ahora de la misma manera, al llevar la Enseñanza divina del amor a vuestros semejantes, al hacerlos conscientes de los efectos de una forma de vida correcta o incorrecta, al hacer lo mismo que hizo Jesucristo.... llevar el Evangelio a los seres humanos.... estáis participando en la obra de Redención de Cristo y estáis ayudando a las almas que yerran o luchan para salir de las tinieblas y entrar en la luz.

No sabéis cuán indescriptiblemente importante es señalar a los humanos la Enseñanza divina del amor, y es por eso que a vosotros, que recibís la Palabra de Dios directamente de lo alto, se os recuerda repetidamente, porque tenéis muchas oportunidades de predicar el amor y debéis aprovechar cada oportunidad, porque sólo a través del amor el ser humano puede cumplir su tarea terrenal, y sólo a través del amor puede redimirse a sí mismo. Jesucristo en Su gran amor, dio un ejemplo vivo de lo que defendía y recomendaba a través de Sus Enseñanzas.

Él murió la muerte más amarga en la cruz por amor a los seres humanos.... Ahora debéis seguir transmitiendo la Enseñanza de amor de Jesucristo, vosotros también debéis ser un ejemplo vivo, vosotros mismos debéis llevar una vida de caridad desinteresada y y activa y así despertar el amor en vuestros semejantes, debéis seguir a Aquel, Que verdaderamente os mostró el amor más grande.... Que llevo la culpa de vuestros pecados y ofreció a Dios la expiación por ellos. Él dio a Sus discípulos la tarea de difundir el Evangelio por todo el mundo.... “Salid y enseñad a todos los pueblos....” No les pidió nada más, como ahora os pide a vosotros lo mismo.... difundir la Palabra. Y Su Palabra enseña el amor.

Quien inspira a sus semejantes a actuar en el amor, quien vive una verdadera vida de amor, quien toma nota de la Palabra de Dios, es decir, la recibe de lo alto o de sus mensajeros y transmite lo que recibe a sus semejantes, es un discípulo de Jesús, es uno de Sus apósteles, a quienes Él envía al mundo para enseñar a todos los pueblos. Porque los seres humanos necesitan de Su divina Enseñanza porque están privados de todo amor y deben, como cosa más necesaria para la salvación de sus almas, despertar el amor en sus corazones, de lo contrario se perderán para siempre.

Dios sólo les exige una cosa: practicar el amor, y si se cumple este mandamiento, el alma se salva de una muerte segura. Sin embargo, los seres humanos no son lo suficiente conscientes de esto y por eso necesitan que se les recuerde una y otra vez su verdadero propósito de la vida, transformarse al amor. Y esta tarea recae en vosotros, vosotros que estáis llamados por Dios a difundir Su Enseñanza de amor, y seréis verdaderos seguidores de Cristo, seréis activos redentoramente en la Tierra y también un día en el reino espiritual....

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise