Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/4692

4692 Transformación de la Tierra en el momento.... Milagros de la creación....

18 de julio de 1949: Libro 54

El acto de la transformación de la Tierra es incomprensible para vosotros los humanos, pues no se realiza en el marco de la ley, como toda obra de creación terrenal hasta ahora se ha producido en el camino de un lento desarrollo ascendente, sino que será la obra de un instante, aparte de la destrucción previa, que afecta a todas las creaciones de la vieja Tierra y que, por tener lugar ante los ojos de los arrebatados, y también puede ser observada inicialmente por los humanos que están a punto de ser destruidos, requiere su tiempo como es la ley de la naturaleza.

Así que los humanos pueden seguir el curso de la obra de destrucción, y por eso Dios no obra en contra de la ley, mientras que la reorganización de la Tierra es una obra de Dios en el universo que no es visible al ojo humano, y por eso Dios no necesita tiempo, sino que puede llevar a la existencia en el momento todo lo que Su poder de amor y Su sabiduría quieren lograr.

Los seres humanos llevados a la Nueva Tierra encontrarán una creación terminada de una diversidad extraordinariamente atractiva.... Creaciones que sus ojos nunca han visto los asombrarán, especialmente porque todavía recuerdan las creaciones de la vieja Tierra y constantemente establecen comparaciones. Se encontrarán verdaderamente en el paraíso, en completa armonía con su divino Creador y Padre, cuidados y guiados por Su amor e instruidos en todo lo que les es ajeno. La relación entre los humanos será como una gran familia, y todos se esforzarán por ganar el amor del Padre Celestial, por vivir para agradarle y por practicar la caridad.

No pueden estimar la duración de su ausencia de la vieja Tierra y su estancia después de su rapto, porque se les ha quitado el concepto del tiempo hasta su regreso a la Tierra, por lo que no tienen idea del período en el que se creó la Nueva Tierra. Pero también saben que para Dios nada es imposible y por eso consideran probable la creación repentina, por lo que su amor y veneración a Dios aumenta constantemente y su dicha aumenta cuando contemplan la maravillas que dan testimonio del amor, sabiduría y omnipotencia de Dios, y que ofrecen a los seres humanos una compensación mil veces mayor por la tribulación y el sufrimiento en el último tiempo de la existencia de la vieja Tierra....

Dios probablemente prueba severamente a los humanos, pero también recompensa su fidelidad, y bienaventurado el que esta entro los que experimentan el fin de esta Tierra como ovejas de Su rebaño.... bienaventurados los que tienen que soportar y perseverar lo peor y cambiarlo por lo más hermoso, el paraíso en la Nueva Tierra con la presencia constante del Padre entre Sus hijos.... bienaventurados los que perseveran hasta el final, cuando Dios Mismo vendrá en las nubes para llevarlos a Su Reino de la paz, hasta que los pone de regreso en la Tierra, que realmente revelará maravillas que ningún ser humano puede soñar, porque no hay nada en la Tierra vieja que pueda citarse como comparación. Pero el amor de Dios no tiene límites, y Su voluntad creadora es inagotable, realizando continuamente nuevas obras que superan todas las anteriores, para deleitar a Sus hijos y recompensar su fidelidad....

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise