Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/4680

4680 Valor de las Revelaciones Divinas....

30 de junio de 1949: Libro 54

El valor de las revelaciones espirituales es reconocido sólo por unos pocos y no puede demostrarse a los seres humanos de manera escolar, pero traerá gran alegría a todos los que despierten el espíritu dentro de sí mismos y ahora sean dignos de recibir revelaciones divinas. Sólo se puede mencionar a otros seres humanos, pero el extraordinario don de la gracia sólo se vuelve comprensible primero para el espiritualmente despierto. Y, sin embargo, hay que hacer que los demás seres humanos sean conscientes de esto, porque cada revelación divina contiene la fuerza dentro de sí misma y, por lo tanto, todavía puede tener un efecto en el corazón, de modo que siente el beneficio y la verdad de lo que se le trae como revelación divina y ahora lo desea una y otra vez, lo que también puede conducir al despertar del espíritu.

Lo que viene de Dios nunca dejará de tener un efecto beneficioso.... pero ese efecto presupone una determinada actitud hacia Dios.... el ser humano tiene que reconocer a Dios y tener su voluntad dirigida hacia Él.... Entonces percibe también Su Palabra, Sus revelaciones como una bendición, siente la fuerza que fluye de la Palabra de Dios, y busca recurrir más a menudo a esta bendición, él desea la Palabra de Dios, la recibe agradeciendo y es consciente de que así se acerca a Dios Mismo. Porque Dios está presente para él tan pronto como sabe que el deseo y la voluntad del ser humano se dirigen hacia Él. Una revelación divina es pues siempre una prueba de la presencia de Dios, aunque no sea transmitida directamente sino a través de boca humana.

El oyente siempre podrá sentir la fuerza de la Palabra en forma de un mayor deseo por el don divino. Muchos hombres pueden beneficiarse de la bendición de las revelaciones divinas, pero la mayoría carece de conocimiento y por tanto desconocen el don extraordinaria de la gracia, sobre el Amor, Que se revela a través de una revelación a quienes quieren conocer a Dios. Y sin conocimiento no se esfuerzan por conseguirlo, pero sin esfuerzo y deseo no se les puede conceder ningún don de gracia, porque entonces permanecería completamente inadvertido. El hecho de que Dios Se revele prueba la relación íntima del Creador desde la eternidad con Sus criaturas, a las que quiere dejar participar de Su irradiación de amor, a las que Él quiere poner en posesión de luz y fuerza....

(02.07.1949) Porque Él sabe acerca del estado débil y necesitado de los seres humanos, quienes en verdad son Sus criaturas desde la eternidad, pero quienes a través de su voluntad equivocada, comenzaron su vida terrenal como seres espirituales alejados de Él y que deben volver a dirigirse hacia Él en el libre albedrío. Pero sin ayuda no son capaces de hacerlo, por eso el amor de Dios viene a ellos y quiere fortalecerlos y moverlos a cambiar su voluntad. Pero para que lo reconozcan, Él Se les revela de diversas maneras, de modo que ahora les es posible ponerse en el estado luminoso desde el principio, si tan sólo lo desean.

Por eso las revelaciones son de un valor tan inmensurables, ya que pueden formar el destino de lo espiritual para que sea bienaventurado para toda la eternidad, pero siempre depende del libre albedrío del ser humano durante su existencia terrenal. Dios se ha revelado constantemente desde el principio de la creación, la conexión entre Dios y el ser humano nunca ha terminado, Sus revelaciones siempre fueron la luz que atravesó la oscuridad de la noche.... la ignorancia de las criaturas caídas.... y siempre fue posible llegar a la fuente original de luz, a Dios.... Pero una y otra vez la luz fue enturbiada, es decir, lo que venía de Dios brillante y radiante fue oscurecida o extinguida completamente por la voluntad humana.

La verdad ha sido permeada por el error o desplazada por la mentira. Las revelaciones divinas fueron distorsionadas y en este estado fueron presentadas todavía a los humanos como divinas. Como resultado la humanidad cayo cada vez más en las tinieblas, a excepción de unos pocos que, por su propia voluntad, se abrieron a las revelaciones divinas y ahora pudieron recibir nuevamente luz radiante. A veces, esos rayos de luz brillan en medio de la oscuridad de la noche y su efecto es indescriptiblemente beneficioso para la perfección de las almas que se encuentran el proceso del desarrollo ascendente y necesitan la ayuda de Dios, pero, por el contrario, las revelaciones distorsionadas tienen una influencia desfavorable sobre este proceso, incluso impidiéndolo en la mayoría de los casos.

Por lo tanto, Dios siempre Se revelará a aquellos que tienen buena voluntad y se ponen en un estado que permite revelaciones directas o indirectas. Porque Dios es la Verdad Eterna, y Él también quiere conducir a los seres humanos a la verdad, porque sólo la verdad es luz y conduce a los humanos a la verdadera cognición del Ser de Dios, que es Amor, Sabiduría y Omnipotencia, y así también despierta en ellos el verdadero amor a Dios.

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise