Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/4074

4074 Pasado.... Presente.... Futuro....

1 de julio de 1947: Libro 50

Los términos de pasado, presente y futuro no existen en el reino de los espíritus puros, es decir, cuando se ha alcanzado el grado de perfección, los términos son inválidos para el alma, en cierto modo, en la eternidad todo es atemporal. En retrospectiva, el alma puede volver a experimentarlo todo, no tendrá la impresión de estar en el pasado, sino como espíritu, el término para tiempo y espacio desaparece, porque el tiempo y el espacio es algo delimitado y, por lo tanto, no se puede separar del estado de imperfección. (01.07.1947) Sin embargo, algo limitado no puede ser un fenómeno acompañante en el estado de perfección, porque no hay limitación para este estado. Y es por eso que el concepto de tiempo y espacio debe abandonarse, porque siempre incluye una limitación.

Pero el hombre no puede imaginárselo, pero debe hacerse comprensible para él, porque esto contribuye mucho a la explicación de fenómenos misteriosas que de otro modo el hombre no es capaz de creer. Las personas espiritualmente maduras, también debido a una misión, pueden tener visiones que remontan mucho al pasado y, sin embargo, se reproducen de forma realista sin haber tenido jamás una conexión con el pasado. Y entonces solo se puede aplicar la explicación de que el grado de madurez de esa persona le capacita ver experiencias pasadas, que entonces se deprende de la tierra, que su alma con el espíritu en ella habita en esferas de la luz y allí, mirando hacia atrás, tiene las experiencias más maravillosas y puede reproducirlas en la medida en que esto sea beneficioso para el hombre a través de la voluntad de Dios.

Entonces el alma vive todavía en la tierra, pero ya es candidata para el reino espiritual, solo que su alma siempre regresa a la tierra para poder reproducir las impresiones del reino espiritual también en la tierra, para despertar la fe de los semejantes o animarla. Es esta una misión que igualmente requiere una madurez, si el hombre quiere servir a Dios y transmitir sus experiencias para animar al prójimo para el trabajo activo de alma, para llegar a alcanzar el estado de perfección ya en la tierra. Porque la gente necesita consejos, avisos que convencen y también critica si no lo toman en serio. Las personas de vez en cuando necesitan fenómenos extraordinarios que les estimulen a pensar, y cuando se dedican a lo último, también deberían recibir una aclaración veraz, si tienen interés en esto.

Retroceder al pasado solo es posible en un alto grado de madurez, y este es un signo seguro de la perfección, que ya da derecho a entrar en las esferas de luz, y tal persona solo permanece en la tierra por una misión, de lo contrario la mediación de las experiencias pasadas no tendría que tener lugar sin la compulsión de creer, que, sin embargo, no debe tener lugar, según la voluntad de Dios.

Es por eso que incluso pruebas tan obvias de la actividad divina a menudo tienen lugar de forma natural, dejando siempre abierto el problema de cómo el hombre ha llegado a tales conocimientos, cuando el concepto de visión espiritual aún no le es comprensible.

Siempre hay solo una aclaración espiritual que se puede dar, y el concepto de espacio y atemporal solo puede entenderse entonces, si el hombre a través de sus propios esfuerzos ha alcanzado un mayor grado de madurez, que le aporta conocimiento espiritual. entonces la explicación sobre fenómenos misteriosos se le será comprensible y solo profundizará su fe....

Amén

Traducido por Hans-Dieter Heise