Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/3809

3809 Guías espirituales... Camino terrenal... Señalizar...

23 de junio de 1946: Libro 48

Las personas desconocedoras del camino correctas se descarrían y se alejan de la meta correcta en lugar de acercarse a ella. Y por eso necesitan a guía de camino, que conozca bien el camino correcto y advierte, amonesta y pide atención, donde existe el peligro de tomar un camino equivocado y perderse el camino correcto. Pero quien es conocedor del camino, también conoce la meta, y ahora ayudará con entusiasmo a sus semejantes a alcanzarla también...

Pero la meta de la vida terrenal es el reino espiritual en toda su gloria... y el camino a este es laborioso y angosto, no es fácil caminar, pero corto, si se recorre sin detenerse, si la persona no duda o mira permanentemente hacia atrás en busca de un camino más fácil de transitar... entonces se puede alcanzar la meta rápidamente. Es decir, una persona aún puede alcanzar un grado de perfección en la tierra, que lleva el reino de Dios en sí mismo, que el peso de la tierra ya no le pesa, que encontró la unión con Dios antes de ser libre de su cuerpo terrenal.

Pero luego se abren amplias áreas ante su ojo espiritual, que lo llenan de felicidad, entonces se olvidan todos los acontecimientos y problemas del camino, porque no superan las glorias que se le conceden ahora. Y entonces el alma está agradecida por la guía que la ha cuidado en el camino terrenal... Pero la guía correcta es Dios Mismo, Quien instruye a las personas en la tierra a través de Su Palabra y por lo tanto les da conocimiento del camino correcto que lleva hacia Él.

Y Él instruye a los siervos dispuestos en la tierra a asumir el cargo de liderazgo, es decir, a llevar Su palabra a la gente, Él instruye Sus siervos de antemano en la pura verdad, para que ellos luego sean mediadores para sus semejantes, para que ellos también tomen nota de la verdad, de la Palabra de Dios, que fluye de Su boca sagrada y es transmitida de Él directamente a la tierra a través de Sus mensajeros. Y por lo tanto, los guías que conocen el camino correcto aparecerán constantemente en el camino y guiarán a los andantes por el camino correcto, les darán conocimientos de los peligros a los que deberán prestar atención, de la meta y de la fuerza de Dios, que está a disposición de cada uno que anda por el camino con el firme propósito de alcanzar la meta, que es la bienaventuranza eterna.

Y estos guías deben ser escuchados, sus consejos y amonestaciones deben ser atendidos, porque han sido ordenados por Dios para dárselos a las personas para que no se extravíen, para que no puedan decir que no han encontrado el camino correcto, sino que pueden entrar y seguirlo en cualquier momento, si disponen de la voluntad seria de lograr el objetivo. Estos guías os anuncian la Palabra de Dios, que es el camino correcto... Porque la Palabra de Dios es verdad, porque Dios es la verdad eterna Misma; lleva hacia la meta... a la vida eterna... y quien se elige a sí mismo como guía, aceptando y cumpliendo la Palabra de Dios, nunca puede perder el camino correcto, alcanzará su meta... vivirá para siempre...

Amén

Traducido por Hans-Dieter Heise