Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/2476

2476 Cambio espiritual... Reorganización... Lucha contra las enseñanzas de Cristo...

17 de septiembre de 1942: Libro 33

Hasta qué punto el mundo sigue andando en el error se puede ver en la opinión errónea, muy difundida entre la humanidad, de que se puede realizar un cambio espiritual por medio de nuevas reorganizaciones planificadas en el campo religioso. Esta opinión subyace en todos los esfuerzos por intervenir en todas las direcciones espirituales existentes para impedirlas o disolverlas. Y la gente no considera que los esfuerzos espirituales tengan que llevarse a cabo sin ninguna compulsión si se quiere que se sientan muy profundamente en el interior. Tan pronto como se impide la libertad espiritual, es decir, se obstaculiza el esfuerzo del ser humano o se le empuja en una dirección espiritual, no se puede hablar del desarrollo espiritual del hombre, porque esto requiere completa libertad de voluntad. En consecuencia, el desarrollo espiritual nunca puede lograrse de manera esquemática.

El mundo, es decir, la humanidad de mente mundana, tampoco se esfuerza por un desarrollo superior del alma, sino que solo busca deshacerse de lo que ya existe y reemplazarlo por algo nuevo como compensación... Lo nuevo debería, por así decirlo, superar todo lo que ha pasado antes, debe suprimir todas las enseñanzas que se han ofrecido a la gente hasta ahora, y así la enseñanza de Cristo también debe ser suprimida y por lo tanto reemplazada por ideas recogidas humanamente... a través del conocimiento de personas guiadas erróneamente que ahora se supone que quieren espaciar el error entre las personas nuevamente.

La humanidad ya se ha alejado muy lejos de la verdad, pero hasta cierto punto todavía se aferra a las viejas tradiciones que aún contienen verdad... Pero ahora incluso éstos deben ser descartados y lo que se ofrece a la gente como sustituto no lleva ni una chispa de verdad en sí mismo, sino que son ideas de personas de mente terrenal que carecen de cualquier luz y que andan en la tierra en la oscuridad espiritual. Ellos mismos viven en el error y ahora están tratando de difundirlo...

Y encuentran poca resistencia, porque la humanidad misma se encuentra en las más profundas tinieblas, y por lo tanto no reconoce qué es verdad y qué es error. Y mucho menos reconoce que tal cambio espiritual jamás podrá darse, porque la gente trata de suprimir la Palabra de Dios pero ésta es imperecedera y existirá mientras exista la tierra; en consecuencia, la lucha contra la enseñanza de Cristo, que no es otra cosa que la Palabra de Dios, es desesperada, porque Dios nunca permitirá que prevalezca una dirección espiritual, que está dirigida contra la enseñanza del amor divino, y por eso los hombres pueden hacer planes como ellos quieren, no llegarán a un resultado satisfactorio porque ellos mismos actúan en contra de Dios y Su Palabra y por lo tanto tienen que perder todo el tiempo, porque Dios y Su Palabra son imperecederos; pero lo que los hombres permiten que llegue a surgir no perdura y, por lo tanto, debe desmoronarse en sí mismo...

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise