Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/1042

1042 Guías espirituales.... Por qué es necesario pedir ayuda....

8 de agosto de 1939: Libro 19

Es una cosa incomparablemente reconfortante poder caminar la vida en la tierra bajo el cuidado constante de los guías espirituales, y este pensamiento es tan inmensamente tranquilizante para aquellos que carecen de fuerza de voluntad y, sin embargo, no quieren actuar en contra de la voluntad de Dios. Cualquiera que viva bajo una amenaza constante también debe ser consciente de la protección para no volverse ansioso a pesar de la amenaza.... Y todo ser humano se encuentra en una situación vulnerable considerando que el poder contrario lucha constantemente por su alma y por lo tanto tiene el mayor interés en derribar al ser humano.

Pero si el ser humano se refugia en los poderes espirituales que le fueron asignados para la protección durante la carrera terrenal, estos ahora pueden proteger cuidadosamente este niño terrenal y bloquear el camino de los malos poderes al alma del ser humano, y esto significa un tremendo alivio para el alma que lucha. Sin embargo, es absolutamente necesario llamar a estas fuerzas, de que hecho están listas para ayudar en cualquier momento, pero de acuerdo con la ley divina no se les permite brindar su ayuda sin que se les pida.

Porque el poder del amor de estos seres espirituales perfectos es tan grande que no permitirían que ningún ser terrenal entrara en problemas y peligro por su propia voluntad, pero en consecuencia tampoco habría posibilidad de que el ser humano entrara en peligro en absoluto; y por otro lado, los peligros deben influir en el hijo terrenal para que sea activa por su propia actividad y también para que pida ayuda espiritual por su propia voluntad, para así expresar el libre albedrío, pero que inevitablemente primero tiene que ser sacrificado al Padre en el cielo.

Pero si éste se dirige al Padre en el cielo por su propia voluntad, entonces se da también a los amigos espirituales toda la posibilidad de brindarle toda la ayuda concebible, porque entonces se cumplen las condiciones previas que permiten al hombre en la tierra participar en la concesión divina de gracia, que también incluye el cuidado de los amigos espirituales. En esto siempre se reconoce el sabio cuidado del Señor.... la ayuda está disponible para vosotros en una medida ilimitada, se os ofrece en todas las formas y nunca estáis desprotegidos en la vida si la necesitas y la pedís íntimamente.

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise