Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/0709

0709 Muchos son llamados... El poder de la oración para la receptividad...

12 de diciembre de 1938: Libro 15

Mira, hijo Mío, el camino a la vida eterna aún puede ser recorrido bajo Mi guía... Yo comprendo todo y estoy tratando con todo amor de desviaros del camino erróneo y aclararos la inutilidad de vuestro esfuerzo mundano... Y quiero evitaros todo sufrimiento en la tierra y en el más allá. Si ahora seguís Mi Palabra y tomáis de ella toda la fuerza espiritual, si permitís que los pensamientos de la eternidad entren en vosotros y os sirváis unos a otros con amor, vuestro camino de vida no será difícil, pero sin Mi Palabra nunca encontraréis el camino correcto, porque ya estáis demasiado alienados de lo espiritual y vuestro pensamiento se ha vuelto materialista... Yo Mismo estoy tan lejos de vosotros porque os habéis alejados de Mí y cuanto más solos andáis por la vida, cuanto mayor es la distancia de Mí, tanto más grande será la distancia de Mí, y Yo Mismo no puedo traeros de vuelta, porque tenéis que ser activos por vuestra propia voluntad, por el libre albedrío, que es indispensable para ganar la filiación de Dios. y así veo con tristeza la poca atención que prestáis a la salvación de vuestra alma... cómo no pensáis en el modo equivocado de vuestra vida...

Y de nuevo es sólo Mi gran misericordia y Mi amor infinito por vosotros que os anuncio Mi voluntad... Y os llamo a todos vosotros, Mis hijos en la tierra... y a todos vosotros se os permite escuchar Mi Palabra como solo la deseáis. Pero cómo queréis recibir si vuestra voluntad no es lo suficientemente fuerte... Cómo os voy a hablar a vosotros que no creéis plenamente en Mí y anheláis Mi presencia... Cómo queréis escuchar Mi voz en vuestro corazón si vuestro corazón no se ha inflamado de amor por Mí... y sin embargo sólo puedo expresarme a través del amor y en el amor. Ciertamente son tantos los llamados, pero sólo unos pocos son los elegidos, y estos últimos han de sacrificarme por completo su voluntad para luego recibir también infinitamente más de lo que han dado por Mí.

El poder de la oración es subestimado por todos vosotros... es tan grande que tendréis éxito en todo lo que pidáis en oración... Así también seréis apreciados como recipiente de Mi palabra y de Mis sabidurías, si os esforcéis íntimamente por eso, y suplicáis la gracia de tal premio del Padre celestial. Todo vuestro esfuerzo espiritual no será en vano porque ciertamente no pediréis nada malo al respecto. Quiero dar esto a las pocas personas que Me aman y desean Mi Palabra en la mayor medida, que saquen de ella todas las fuerzas para levantarse de las tribulaciones e ir por la vida en la tierra llenas de esperanza hacia una vida feliz en el más allá.

Y todo lo pesado en la tierra caerá de ellos cuando estén en posesión de Mi Palabra y se esfuercen por vivir de acuerdo con esta Palabra. Por lo tanto, quien se esfuerce por ello, también será apreciado por Mí si sólo presta atención a la voz interior... Porque Yo estoy de nuevo entre la personas en la tierra que son de buena voluntad y les traigo refrigerio y consuelo, refresco y fortalecimiento a través de Mi Palabra, y si os doy esta promesa, nunca tenéis que temer el hundimiento de vuestro cuerpo y de vuestra alma... Sólo el cuerpo puede separarse sin dolor del alma, pero ésta entonces, en forma de luz, puede entrar para siempre en los campos de la felicidad...

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise